Como ya es tradicional en nuestra Hermandad de La Paz, el segundo sábado de noviembre se organizó la VI Peregrinación a la Aldea almonteña para visitar a la Virgen del Rocío.
De nuevo el camino lo hicimos andando por la Raya Real desde el cancelín de la carretera de las fresas hasta la propia ermita. En Palacio realizamos la primera parada para el desayuno. Posteriormente a las 12 del mediodía rezamos el Ángelus entre los pinos. A las 14:30 llegamos a la Ermita donde los hermanos de La Paz depositamos un ramo de flores a las plantas de la Señora, cantamos la Salve y dimos los tradicionales vivas a la Virgen del Rocío.
Es de agradecer el buen trato dispensado a la hermandad por los responsables de la Ermita y de la Hermandad Matriz, ya que nos dieron todo tipo de facilidades para llegar hasta la Virgen del Rocío.
Tras un rato de oración personal y de gracias a Dios celebramos la comida en la Casa Hermandad de Sevilla, en agradable convivencia entre los más de cien hermanos que acudimos al Rocío.
El tiempo acompaño y el ambiente vivido de hermandad y amistad entre todos hizo que pudiéramos disfrutar de un maravilloso día.
El año que viene, si Dios quiere, volveremos a las plantas de la Reina de la Marismas como Hermandad de La Paz el segundo sábado de noviembre.