Como viene siendo habitual desde hace cinco años, la Hermandad reconoce y de este modo entrega su escudo de oro a aquellos hermanos que ya han sobrepasado con creces sus bodas de oro como miembros de nuestra Hermandad. Poco a poco y año a año, todos los hermanos con más de cincuenta años de antigüedad lo irán recibiendo.
En esta ocasión les ha correspondido a este grupo de hermanos a los cuales les damos la enhorabuena y los felicitamos como ejemplo que son para las nuevas generaciones.