Las familias de la Hermandad, representadas por un grupo de 56 niños con edades comprendidas entre 9 y 12 años, fueron los que ejercieron de padrinos de la coronación.
Ataviadas ellas con traje blanco y ellos con camisa alba y pantalón gris, con la medalla de la hermandad colgada de sus cuellos, estos niños participaron disciplinadamente de la procesión de entrada portando en su manos una rama de olivo, símbolo de la paz.
Cuatro de estos niños fueron los encargados de portar sobre unas pequeñas andas la presea de la coronación. Sofía Flores Herrera, Javier Lena Perea, Jesús Yoldy Gómez, todos ellos con 12 años, y María del Mar Sánchez Castro, de 11, podrán contar el día de mañana que fueron ellos los que, en representación de todas las familias de la Hermandad, acercaron al arzobispo la corona para que le fuera impuesta a la Virgen de la Paz, mientras que un quinto niño, Jaime Gómez Lancha, de 12 años, les acompañó portando el acetre con el agua bendita y el hisopo.
Los niños, el futuro de la Hermandad, fueron los testigos excepcionales de la Coronación de María Santísima de la Paz.
Fotografías: Miguel Ángel Osuna
Texto: José Gómez Palas (El Correo de Andalucía)