Una joven cofradía del Porvenir, que acaba de cimentar de una manera muy solemne y cauta los fastos de su primer XXV aniversario, se encontraba quizás, ante la más importante decisión desde el origen fundacional de la misma, su participación en las Misiones Generales que el cardenal José María Bueno Monreal había propuesto celebrar en la ciudad de Sevilla.
Corría el año 1965, la Hermandad de la Paz empezaba a disfrutar de la primera efeméride de importancia. Además, meses atrás se celebraron elecciones, nombrándose como Hermano Mayor a D. Ricardo Sánchez Carreras1. Antes, el 24 de Octubre de 1964, se celebró un cabildo de oficiales de cara a la organización de los actos que se celebrarían con motivo de las Misiones Generales. En este cabildo, se aprueba por unanimidad la participación de la Hermandad de la Paz en las mismas, nadie se opone, y se ve con buenos ojos que los titulares de la cofradía presidan el altar que se instale en la zona elegida para tal fin2.
En el mes de Enero, se confirma que el lugar seleccionado para que las imágenes de la Hermandad de la Paz presidan dicha ceremonia, sea el Centro Misional de la Plaza de Santa Genoveva, en el Tiro de Línea. La Hermandad al analizar el lugar donde serían trasladas las imágenes, decide que no es un lugar seguro y no reúne las condiciones adecuadas para ello, ya que varios días antes debido a un fuerte viento, la caseta fue derribada completamente. Es por ello, que se decide que ocupe éste lugar un crucifijo de grandes dimensiones que aportaría el párroco de la Hermandad, ya que en un principio la imagen destinada sería la de Nuestro Padre Jesús de la Victoria. Finalmente, a las ocho de la mañana del domingo día 7 de Febrero, la imagen de Jesús de la Victoria, luciendo la túnica bordada de Leopoldo Padilla, presidió un Vía Crucis por el barrio del Tiro de Línea, en el que también estuvieron presentes las imágenes del Señor Cautivo y la Virgen de las Mercedes del citado barrio. Días más tarde, el 10 concretamente, la imagen fue trasladada al centro de misión de Santa Genoveva, una vez que los problemas de sujeción de la caseta fueron subsanados. La imagen volvería al Porvenir la mañana del día 15 de Febrero, haciendo su entrada en la Parroquia de San Sebastián pasada la una del mediodía3.
Tras estas decisiones se aprueba que María Santísima de la Paz ocupe el altar mayor de la Parroquia de San Sebastián el tiempo que duren las Misiones Generales, así como, el traslado de la imagen para presidir en la Plaza de América la misa de comunión con motivo de las Misiones. El acto tendría lugar el domingo 14 de Febrero, y para ello, la imagen, fue portada a hombros de sus hermanos en unas andas sencillas preparadas para la ocasión. Donde sólo dos jarras exornaban, junto a un pequeño friso, estas minúsculas parihuelas. La Virgen lucía su corona de salida y un manto de raso color blanco, junto a la sencilla toca de sobremanto que disponía la Hermandad para culto interno.
Una vez finalizado el acto, la Virgen volvió al Porvenir y los misioneros de los centros de San Sebastián y Santa Genoveva, fueron nombrados Hermanos de Honor de la cofradía4. El destino quiso que casi medio siglo después, y con motivo del 75 aniversario de la corporación, el palio de María Santísima de la Paz volviese a presidir el pabellón Mudéjar de la Plaza de América, tal y como sucediese un 14 de Febrero de 1965.
Juan José García del Valle
Hermano de la Paz
1 Archivo Hermandad de la Paz. Acta consultada del 10 de Octubre de 1964.
2 Archivo Hermandad de la Paz. Acta consultada del 30 de Enero de 1965.
3 BCS, Febrero 2013, pg. 93.
4 ABC de Sevilla. Sábado 13 de Febrero de 1965.
